1 – El marco normativo colombiano
Colombia ha definido una política clara de fomento a los biocombustibles como parte de su estrategia de transición energética, reducción de emisiones y desarrollo rural. Este proceso involucra múltiples actores institucionales:
- Ministerio de Minas y Energía (MinEnergía): Entidad rectora en materia energética, define las mezclas obligatorias de biocombustibles con combustibles fósiles, así como los incentivos normativos y las metas de cobertura nacional.
- Unidad de Planeación Minero Energética (UPME): Desarrolla estudios técnicos y proyecciones de oferta y demanda. También evalúa la infraestructura disponible y recomienda ajustes normativos con base en escenarios de transición energética.
- Instituto Colombiano Agropecuario (ICA): Regula los estándares sanitarios y fitosanitarios aplicables a la producción agrícola destinada a biocombustibles, como caña, palma y maíz. Su rol es fundamental en la trazabilidad y sostenibilidad de las materias primas.
Además, otras entidades como el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) participan en el otorgamiento de permisos ambientales requeridos para la operación de plantas de producción y transporte.
2 – Normativa clave aplicable
Entre las normas más relevantes del sector se encuentran:
- Ley 693 de 2001 y Ley 939 de 2004, que promueven el uso de biocombustibles.
- Decretos reglamentarios sobre mezclas obligatorias y requisitos técnicos.
- Resoluciones específicas de la UPME sobre cupos de producción y lineamientos de infraestructura logística.
3 – Influencia de marcos internacionales
El desarrollo de los biocombustibles está estrechamente vinculado a compromisos multilaterales como el Acuerdo de París y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Además, organismos técnicos internacionales están fijando estándares que impactan directamente a los actores colombianos:
- IATA (Asociación Internacional de Transporte Aéreo): Establece requisitos para la adopción de Combustibles Sostenibles de Aviación (SAF), una categoría clave de biocombustibles avanzados.
- Organización de Aviación Civil Internacional (OACI): Implementa el esquema CORSIA para controlar las emisiones del sector aéreo, el cual exige trazabilidad y sostenibilidad certificada en los biocombustibles utilizados.
- Unión Europea y Estados Unidos: Aunque no son reguladores locales, sus estándares de sostenibilidad influyen en la exportación de biocombustibles desde Colombia. Certificaciones como ISCC o RSB son frecuentemente requeridas.
4 – Desafíos del entorno regulatorio
El marco actual aún presenta desafíos, entre ellos:
- Disparidad entre las normas ambientales y energéticas.
- Falta de actualización en algunos decretos regulatorios.
- Barreras logísticas para cumplir con estándares internacionales.
- Necesidad de mayor articulación interinstitucional.
Conclusión:
El cumplimiento normativo en el sector de los biocombustibles no solo es una exigencia legal, sino también una ventaja competitiva. Aquellas empresas que comprendan a fondo el entorno regulatorio estarán mejor posicionadas para aprovechar incentivos, atraer inversión extranjera y expandir su participación en mercados internacionales. Desde BP Lawyers, ofrecemos acompañamiento especializado para enfrentar los desafíos legales de este sector en transformación constante.
